Que padeler@ no ha tenido un mal día en la pista (o dos, o tres…), partidas en la que no te sale nada, no entra ni una y todo lo que intentas te sale mal o peor. Si eso se combina con que tu rival tiene uno de esos momentos en que todo lo que toca, lo convierte en puntazo…entonces ya, apaga y vámonos. Y cada vez que se acera la pelota a nosotros, ya sabemos que no va entrar cuando le demos.
En días como ese, durante los primeros juegos, vamos pidiendo disculpas a nuestra pareja de partido, pero a partir del segundo set, nuestro cerebro nos lleva hacia otro tipo de comportamiento: cabizbajos, desgana en los golpes, ganas de romper la pala, etc, etc, ya que somos conscientes que ese día no nos va a salir nada de nada, por mucho que lo intentemos.
Pero la peor actitud que podemos aportar al mundo del pádel, aunque la más entretenida y divertida para los que la presencian, es la de poner excusas al porqué no acertamos ni una. En lugar de reconocer humildemente que no es nuestro día, o no ha sido nuestra semana, siempre hay gente que pone por delante alguna excusa que otra al finalizar el partido.
Es por eso, que aquí os dejamos una lista con las mejores excusas de los perdedores del pádel. Seguro que en algún momento, habéis utilizado una de ellas. Seamos sinceros, no nos gusta reconocer los malos golpes o nuestra limitada técnica.
Si tenéis o habéis oído otras excusas que creáis que son de interés para nuestra cultura “padelniana”, por favor, nos las hacéis llegar a través del formulario de contacto, y con mucho gusto las añadiremos a esta lista de excusas:
- Los focos me deslumbran y pierdo la pelota de vista. Es cierto, que hay pistas que los focos no tienen la mejor inclinación o iluminación, haciendo que nos deslumbre en ocasiones, sobre todo cuando recibimos un ‘globo’. Pero, si el único que fallas mucho eres tú, es que el problema no viene de los focos. Eso sí, ésta excusa va perfecta cuando nos duele el orgullo al no darle ni a la pelota al intentar un smash para ganar el punto.
- La pista está poco iluminada. Hay pistas de pádel con poca luz en algunas zonas de la pista, y de verdad que es molesto, pero como excusa no sirve…que los cuatro estáis en la misma pista, con la misma luz.
- La pala es nueva. Ésta, puede colar la primera semana, pero cuando llevas 2 meses con la pala, casi mejor cambiar de excusa, o infórmate bien antes de camibar de pala, sobre todo si ves que el resto de compañeros solo asienten diciendo: “claro, claro”. Lo que si que está claro es, que existen multitud de Palas de pádel ¿y vas y eliges la mala?
- Las pelotas están viejas y no botan. Vale si, es verdad, que cuando pasamos de novatos a un nivel de juego en el que ya nos creemos Paquito Navarro o Fernando Belasteguín, empezamos a decir: “¿esas bolas que traes están bien?” “No botan mucho, ¿no? “ sobre todo cuando no llegamos a las dejadas, o fallamos la bolas bajas cerca del cristal de fondo… Una cosa está clara, si las bolas están mal, lo están para los cuatro jugadores….Así que, agáchate más y dale a la pelotita verde.
- Estoy lesionado, y claro… Vamos, que si estás lesionado, no juegues. Y si juegas, no lo utilices como excusa. Si estás lesionado de verdad, mira nuestro apartado de lesiones
- No me he adaptado a mi pareja. En este caso, hablamos de esas canarias con cambio de pareja en cada mini-partida, y cierto es que si juegas con compañer@ nuev@ no es lo mismo que con la pareja habitual o la misma durante toda la jornada. Pero si pierdes con todas las parejas que te ha tocado…mmmmm…igual el problema no viene de ellas.